Hemos seguido con gran preocupación los acontecimientos de las últimas semanas en Ecuador. Desde que el gobierno lanzó el paquete de austerismo económico que golpearía a grupos ya económicamente vulnerables en la sociedad, los movimientos indígenas junto con otros movimientos sociales salieron a las calles en protesta. Condenamos el brutal abuso policial y militar que se utilizó para reprimir las protestas pacíficas cuando el pueblo ejerció su derecho democrático a protestar, consagrado en la Constitución, y las violaciones de los derechos humanos que ocurrieron durante la Emergencia Estatal. Según las últimas cifras del Defensor del Pueblo, se ha establecido 8 personas muertos, 1 134 personas heridas y 1 192 personas detenidas en la situación de emergencia, hasta que las dos partes llegaron a un acuerdo el 14 de octubre (Defensoría del Pueblo, 14 de octubre de 2019).
Por la presente dejamos claro que seguiremos monitoreando los acontecimientos en Ecuador y velamos por que el Gobierno cumpla sus compromisos en el acuerdo y que el siguiente proceso se desarrolla en paz, con respeto y diálogo con el movimiento indígena y los movimientos populares en Ecuador.
Exigimos lo siguiente al Gobierno de Ecuador:
- Respetar los compromisos internacionales en materia de derechos humanos y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas
- Liberar a todos los que han sido detenidos durante las protestas
- Garantizar la seguridad de los líderes de los moviminetos indígenas
- Investigar la violencia y los abusos que han llevado a ocho muertos, más de mil heridos y mil personas detenidas, hacer responder a los responsbles de los abusos y dar a las víctimas una indemnización legítima
- Teniendo en cuenta el clima, el medio ambiente y el estado del planeta; responder a las otras demandas del movimiento indígena y detener la extracción de petróleo y minerales en los territorios de los pueblos indígenas
Desde Suecia, hemos seguido con expectación la iniciativa pionera del Ecuador con el reconocimiento de los derechos de la naturaleza. También nos hemos llamado la atención sobre los intentos de sentar las bases de un Estado multinacional que respete los derechos de los pueblos indígenas y de los afrodescendientes. Nos preocupa la dirección que ha tomado últimamente el país y creemos que las demandas de los movimientos de los pueblos indígenas y populares están en sintonía con la creciente preocupación de la comunidad internacional sobre el clima y el estado del planeta en un momento en que todos debemos salvaguardar la casa común de todos: la Tierra
Por eso pedimos acción. Vemos esto como una oportunidad única para que el gobierno de Ecuador revierta la tendencia negativa y avance en la lucha por los derechos de los pueblos indígenas y el futuro de nuestro planeta.
