Nadie escapa de los venenos de la soya
La mayoría de la población de Paraguay vive de la pequeña agricultura. Sin embargo, el 90 por ciento de las tierras agrícolas del país se cultivan para la exportación. Los cultivos requieren abundantes cantidades de pesticidas químicos y dañan las granjas orgánicas aledañas, a los animales y a las personas.
– Es una forma de deshacerse de nosotros, los pequeños agricultores, dice Belén Romero de la Organización de Mujeres Campesinas e Indígenas Conamuri.